Por el Dr. Mario Antonio Mendoza García

Saludo con afecto a la Comunidad Universitaria del IUM y del IUP, el mundo es cada vez más pequeño y los males más globales, esta certeza nos la muestra la pandemia del COVID-19 y sus consecuencias aún impredecibles en cuanto a su magnitud que se suma a esos otros males globales como la profunda desigualdad económica, el cambio climático y el uso de los escasos recursos naturales, solo como ejemplo de una desafortunada y larga lista. El resultado es una civilización en crisis, pero nada cambia hasta que, de bien a insoportable, este cambio similatorio tiene que ver la gente y su vida cotidiana por lo que el cambio esta en transformar nuestros usos y costumbres depredatorias y contaminantes por una forma de vida basada en consumir menos para vivir mejor.

Esta filmación para un absurdo cuando hay miles de millones que no tienen lo mínimo para vivir, pero es todo lo contrario, es garantizar el mínimo necesario para toda la humanidad. Pretende ser una alternativa al modelo de crecimiento vigente productivista y promover una prosperidad estable, solidaria y duradera. A esta propuesta Nicholas Georgescu-Roegen, Serge Latouche y François Schneider, le denominan decrecimiento. El movimiento por el crecimiento trata de romper la teoría de que para ser feliz hay que consumir y producir más.

El decrecimiento clama contra la cultura de usar y tirar, la obsolescencia programada, el crédito fácil, la explotación de los recursos naturales que amenazan el futuro del planeta para los países ricos no existen topes ni al consumo ni a la producción y casi los siete mil setecientos de millones de personas que habitan el planeta viviesen como las ciudadanos de los países desarrollados el mundo sería totalmente insostenible a causa del consumo per cápita de agua, de luz, de energía, del suelo o de los cultivos o viviendas. Además, Latouche asegura y lo cito, “vivimos fabotizados por la economía de la acumulación que conlleva a la frustración y a querer lo que no tenemos y ni necesitamos”; tener más significa ser mejor, más feliz y ser más poderoso. La vida se vuelve entonces una carrera desesperada por adquirir más y más, pero, estoy seguro de que la felicidad no tiene que ver con posesiones, va más allá.

No te dejes convencer por todo lo que te ofrecen, investiga y analiza todo lo que vas a comprar y te darás cuenta de que mucho de lo que el mercado tiene la naturaleza ya lo posee en su forma más pura y con mejores resultados. Tener menos no significa ser pobre, tacaño o desadaptado, significa que eres consciente de tus prioridades emocionales, mentales y financieras. Tener más no significa ser más, la felicidad no se mide en términos de objetos de consumo acumulados, si no, en términos de las experiencias vividas.

Cuídate y quédate en casa.

Conversatorios IUP Morelia Episodio 2 ¿Cómo medimos la felicidad?

El Dr. Mario Mendoza García, hoy nos lleva a una reflexión sobre nuestros hábitos de consumo y el efecto que va causando en nuestras vidas y el entorno. Aquí les dejamos los articulos llenos de reflexión de los otros episodios de Conversatorios IUP:http://iupmorelia.edu.mx/2020/04/24/conversatorio-iup-redescubre-la-libertad-una-nueva-forma-de-convivencia/

Posted by IUP Extensión Morelia on Friday, April 24, 2020